Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, aterrizó en la nación insular durante este martes para darle un apoyo diplomático a Taiwán. Esto, a pesar de las advertencias del gobierno chino y su llamado a que los norteamericanos a "no jugar con fuego".
Por primera vez en 25 años, aterrizó en Taiwán un representante de un cargo tan importante como el de Pelosi, el tercero tras la presidencia y vicepresidencia estadounidense.
El canciller de Taiwán, Joseph Wu, estuvo presente en el aeropuerto para darle la bienvenida a un "invitado VIP", según lo descrito por un comunicado publicado por el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Para la presidenta de la Cámara de Representantes, su aterrizaje en Taiwán forma parte de la gira que se encuentra realizando por Asia, pero la República Popular China considera a la isla como una provincia rebelde. Además, la visita de Pelosi llega en un momento donde las relaciones entre Estados Unidos y la potencia asiática están en conflicto.
En tanto, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, declaró que "el principio de una sola China es el consenso universal de la comunidad internacional, la base política para los intercambios de China con otros países, el núcleo de los intereses de China y una línea roja y un resultado final incuestionables" .
Visita a Taiwán
Por su parte, Nancy Pelosi, a través de un comunicado de su delegación, afirmó que "nuestras conversaciones con los líderes de Taiwán se centrarán en reafirmar nuestro apoyo a nuestro socio y en promover nuestros intereses compartidos. Entre ellos el avance de una región del Indo-Pacífico libre y abierta".
Ante esta visita, desde Beijing aseguraron que no se quedaría de brazos cruzados si consideraban que su integridad y soberanía se veía amenazada. Además, calificaron este evento como un "impacto político atroz".
Durante este lunes, en el marco de la conferencia de revisión del Tratado de No Proliferación Nuclear, el secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que el mundo está a un “solo malentendido o un error de cálculo de la aniquilación nuclear”.