Según informó el medio local Daily Mail, tres ciudadanos chilenos ingresaron al Reino Unido con visas de turista para dedicarse al robo de casas lujosas en el condado de Cheshire.
Los delincuentes ingresaban con pasamontañas a diferentes mansiones de Wilmslow y Alderley Edge.
Los sujetos fueron sorprendidos y se dieron a la fuga a bordo de un automóvil, por lo que se produjo una larga persecución de la policía por la autopista M40.
En la huida, el grupo delictual superó los 180 km/h y la persecución se extendió por casi 50 kilómetros, hasta que lograron ser interceptados por los vehículos de la policía.
Al momento de frenar el auto, intentaron huir a pie, pero tres de ellos fueron detenidos por efectivos policiales.
Se trata de Sergio Sepúlveda Castro (27) y los hermanos Héctor (39) y Víctor Paredes Muñoz (31).
Según estableció la policía, los individuos entraron al Reino Unido a fines de 2022 luego de haber recorrido otros países de Europa.
Luego, se establecieron en el sur inglés con el “único objetivo” de robar casas lujosas por todo el país.
Chilean Burglars Sentenced Following Cheshire Police Investigation
— UK News in Pictures(@UKNIP247) (@uknip247) June 18, 2023
Three men from Chile, who travelled to the UK with the intention of committing crimes, have been handed prison sentences following a successful investigation by Cheshire Police. Victor https://t.co/8zk3LLxzKE pic.twitter.com/qEaMx02y1N
Los pasos previos del grupo delictual
Un residente de Broadwalk, Wilmslow, vio en marzo a dos de los chilenos utilizando pasamontañas en su patio mientras sonaba la alarma de su vecino.
Luego de alertar a la policía, se percató que la ventana de su puerta trasera había sido forzada.
De esa manera descubrió que le habían robado 60 libras esterlinas (unos 61 mil pesos chilenos) de un bolso que tenía en la cocina.
Un día después, un residente de West Bank, cerca de Alderley Edge, denunció a un individuo que se encontraba con el rostro cubierto en su casa y que huyó tras ser sorprendido.
Sabrina Worsley, de 18 años, vivió el último episodio delictual de esta banda cuando veía la televisión de su casa mientras su padre se encontraba de vacaciones.
Luego de escuchar voces masculinas, descubrió que la puerta estaba abierta.
Pese a que no lograron robar nada desde el interior de la casa, fueron detectados por las cámaras de seguridad mientras revisaban la vivienda y también al momento de escapar en un vehículo negro que se encontraba cerca.
Un día después de este último intento de robo, el vehículo en que se desplazaban fue detectado en la autopista M40, donde no hicieron caso a las instrucciones de detenerse.
Finalmente, lograron ser reducidos tres de los cinco hombres que se movilizaban en el automóvil.
En dicho vehículo los policías hallaron pasamontañas, herramientas, zapatillas y un sombrero que había sido robado el día anterior.
“Avergonzados y arrepentidos”
Edmund Potts, abogado de los hermanos Paredes Muñoz, aseguró que sus representados se sienten “avergonzados y arrepentidos”.
A su vez, indicó que ambos sujetos estarían conscientes sobre la angustia causada en sus víctimas.
“No era su intención, pero, por supuesto, son totalmente responsables. Lo lamentan mucho”, sostuvo Potts.
Asimismo, agregó que luego de que Héctor ingresara como turista al Reino Unido, intentó buscar un empleo.
“Desde Chile le avisaron que su madre se enfermó y que su pareja estaba embarazada. Se estaba quedando sin dinero”, explicó el abogado.
En esa línea, el defensor agregó que Víctor hizo trabajos de limpieza en distintos lugares, “pero se le estaba haciendo difícil”.
En tanto, Sarah Badrawy, abogada de Sergio Sepúlveda Castro, indicó que el sujeto ingresó al Reino Unido con la esperanza de encontrar un empleo y así trasladar a su familia: “Está casado y tiene una hija de casi tres años”.
“Se había estado hospedando en un hotel, pero se cambió a un Airbnb en donde le robaron sus pertenencias. Se quedó con casi nada. En las dos semanas previas al delito, vivía en la calle”, detalló la abogada.
Resolución de la Justicia
Por su parte, Michael Leeming comentó que la huida en la carretera puso en riesgo la vida de automovilistas y de la policía.
Adicionalmente, sostuvo que los robos ya habían sido planificados, ya que además de arrendar un vehículo, compraron herramientas y pasamontañas.
Tras admitir los cargos, los tres sujetos de nacionalidad chilena fueron sentenciados a tres años. Víctor, quien conducía el automóvil, recibió un año adicional.
“Todos eran miembros de una banda de crimen organizado que llegaron al Reino Unido con el único propósito de cometer delitos”, puntualizó Kieran Marsh de la policía de Cheshire.