Un pescador artesanal sufrió la amputación de una de sus manos luego que un explosivo le explotara en altamar, en la comuna de Coquimbo.
Según los antecedentes, el hombre de 45 años y que es recolector de jibias, se encontraba junto a dos tripulantes a bordo de una embarcación, a unas 5 millas mar adentro en el sector de Boca de Guayacán.
Bajo esas circunstancias, las personas observaron en el mar un objeto flotando, el cual, al extraerlo y manipular lo que estaba en su interior, explotó y cercenó uno de los brazos del pescador artesanal.
Ante lo ocurrido, la víctima fue trasladada hasta el Hospital San Pablo, donde sufrió la amputación de su mano derecha. Pese a esto y a presentar heridas de consideración en su cara y cuello, el hombre se encuentra fuera de riesgo vital.
Conocido el suceso, se comenzó a barajar la hipótesis que el objeto sería utilizado por los pescadores de forma ilegal para ahuyentar a los lobos marinos.
Algo que descartó tajantemente el presidente de la Asociación Gremial de Pescadores de la caleta de Coquimbo, Ricardo Godoy.
En ese sentido, la directora regional de Sernapesca, Cecilia Solís, comentó que no existen denuncias sobre ataques de pescadores a lobos marinos, mucho menos con explosivos.
“Los lobos son una especie en veda y si esto hubiese ocurrido con el manejo de explosivos, se encontrarían varamientos de estos animales con algún daño físico”, señaló.
“Existe un aumento de varamientos, pero están más asociados a la gripe aviar”, puntualizó Solís.
La Brigada de Investigación Criminal de la PDI fue instruida para que lleve a cabo las diligencias para aclarar lo ocurrido.