Tras un fallo unánime, se declaró culpable al Carabinero que disparó una bomba lacrimógena a una joven de 17 años dejándola con lesiones graves.
Los hechos ocurrieron el 26 de enero del 2020 en medio de manifestaciones en Puerto Montt, donde el accionar del uniformado derivó que la víctima sufriera una fractura expuesta y un traumatismo craneoencefálico, asociado a contusión hemorrágica que produjo una intervención clínica.
El dictamen estableció que el carabinero no respetó los protocolos de la propia institución, por lo que el próximo 12 de septiembre se conocerá la sentencia en contra del funcionario.