Luis Jarpa Ramírez, el hombre de 22 años acusado de asesinar a su hijastro de 10 años con Trastorno del Espectro Autista (TEA), fue encontrado sin vida este domingo en el recinto penitenciario donde cumplía prisión preventiva, en la región del Biobío. El imputado había sido formalizado por el crimen ocurrido días atrás en Talcahuano.
De acuerdo con los primeros antecedentes, Jarpa se encontraba aislado en una celda del módulo 89 y, durante el horario de patio, ingresó a un baño donde se habría ahorcado.
Gendarmería informó que fue otro interno quien alertó del hallazgo, y que preliminarmente se descartó la participación de terceros en el hecho.
El imputado había confesado haber estrangulado al menor, tras intentar en un inicio ocultar su responsabilidad.